*EDUCAR ES COMPRENDER E INTERESARSE POR LOS NIÑOS

Se pueden hablar miles y miles de cosas de los maestros o de esta profesión de que no hacen nada, de que esta muy fácil, de que solo están dando ordenes, entre otras, pero lo que la sociedad nunca se da cuenta es que esta carrera implica mucha dedicación, amor, paciencia, respeto, pero sobre todo de tacto pedagógico, esa frase que quizás no habíamos llegado a escuchar en el tiempo que llevamos en la escuela ni nosotros, ni los padres de familia y mucho menos los niños, cuando nos encontramos en nuestras prácticas tal vez se nos presentaban situaciones que teníamos que remediar y ni siquiera llegábamos a imaginarnos que la forma en la que estábamos actuando con los niños para resolverla era el tacto pedagógico porque eso es lo que significa la forma de actuar o ser en la educación, todo esto relacionándolo con la enseñanza – aprendizaje, esta es una habilidad que en su mayoría todos los profesores la deben de desarrollar y no sólo por el simple echo de hacerlo porque es parte de un perfil o un requisito más , sino porque ayuda a resolver un sin fin de cosas, ya sea para motivar a los niños, despertar sus intereses, saber manejar una clase en diferentes circunstancias, solucionar problemas, etc., además de todo esto abre un lazo muy fuerte entre maestro – alumnos porque el docente interviene de la mejor manera posible para ayudar al estudiante a resolver sus conflictos, sin hacerle sentir menos, ni llegándolo a afectar emocionalmente, la forma en que se logrará ayudarlo es interviniendo con una mirada, unas palabras, un ejemplo, entre otras, con todo esto el único objetivo que se quiere alcanzar es que el niño salga beneficiado.

Ante estos hechos nos podemos percatar que esta lectura traen grandes aportaciones a la carrera que nos encontramos estudiando porque trae una gran riqueza de contenido, sin darme cuenta me enseño que para ser maestro hay que serlo desde el corazón porque los niños siempre están contigo no hay que fingir ni ser falsos, los niños siempre se dan cuenta de esto, además ellos son la base de esta carrera y los niños del futuro hay que ayudarlos, saber como tratarlos y sobre todo siempre dejar en ellos una huella significativa que se verá reflejada en el interés sincero que mostramos hacia ellos y en la manera que se relacionen y contribuyan al desarrollo de más niños, igualmente de esto dependerá como viva en un futuro nuestra sociedad, hay que dejar un aprendizaje basado en el buen ejemplo, de la misma manera debemos de brindarles nuestra ayuda a todos y cada unos de los niños que pasen por nuestro camino no solamente a los que presentan problemas, claro que ellos requieren de una mayor ayuda, pero no por eso vamos a dejar a los demás atrás, también esta lectura me gusto mucho porque mencionaba varios ejemplos de cómo actuaban los maestros cuando se tenía el tacto pedagógico y eso es muy importante porque cuando estemos en nuestras prácticas se nos pueden presentar situaciones similares y en base a lo que leímos tenemos la idea o el conocimiento de cómo solucionarlo, como lo he mencionado anteriormente me tiene verdaderamente encantada, espero que día con día vaya desarrollando de la mejor manera posible esta habilidad hasta lograr tener tacto pedagógico, que viene siendo parte fundamental en la profesión de un maestro, así para cuando este en contacto con los niños en mis prácticas o trabajando logré aplicarlo con los alumnos y pueda intervenir de una manera satisfactoria en el camino que lleva el niño.

Asimismo aprendí que al niño hay que tratarlo con afecto, entenderlo, comprenderlo, quererlo; porque son humanos, no objetos a los que puedes tratar como quieras, ellos tienen un corazón en el cual sienten si se preocupan realmente por ellos o sólo lo hacen por cumplir con las normas de una sociedad o de una carrera profesional ya sean los padres o los maestros ellos no tienen la culpa de nada por eso es que esta el tacto pedagógico que no simplemente se aplica en la escuelas, también se trabaja en la casa, con esto debemos darnos cuenta de lo importante que es el tacto pedagógico en nuestra carrera es tan indispensable que no se debe dejar de lado, porque la forma en la que actuamos con los niños puede hacer que nos lamentemos constantemente por como fuimos o satisfacernos por como los ayudamos e influimos en su vida, es mejor predicar con el ejemplo y ser admirados y dejar una sello de gratitud y grandeza en los niños que un resentimiento.

Bibliografía:
Autor: Max Van Manen
Nº de pág.: 159 – 214
Libro: “El tacto en la enseñanza” El significado de la sensibilidad pedagógica.
Título: “El tacto pedagógico”
“El tacto y la enseñanza”
Edición: Barcelona, paidós.